Con ganas de comerle la sonrisa

Con ganas de comerle la sonrisa

Que  ganas que le tengo…

Sin saber cómo es

No sé si será suerte o putería mía

Pero no borres tu sonrisa

No tapes tus ojos

Cuanto más desde tus ojos

Libres de camino para mirarme de vuelta

Si, mirarme de vuelta

Observando tu sonrisa

Que llama de besos fuertes

Esos que me dejarían rendida ante ti

Con un oleaje fácil en mi interior

Yo sedienta

Sin saber de esta locura extraña

Mi carne sedienta

Desnuda

Con una mano en mi pecho

Y la otra pérdida en el recital de mis entrañas

Con ganas de dar este paso inquietante

Sensaciones

Me muerdo los labios pensando el día que le comeré la sonrisa.

Recuerdo

Recuerdo tu rostro relajado

Tus labios desesperados soltando risas 

Te recuerdo picándome como una avispa con cada suspiro

Te recuerdo bajo mis manos

Te recuerdo paseando dulcemente,

Revoloteando tu piel erizada junto a mis pezones

 Recuerdo tus ojos que deleitándose me miraban,

Deleitándome te observaba

Qué picaros, qué míos.

Recorrimos sin saber donde estábamos

Ni quienes éramos

No sabes mi nombre, ni yo recuerdo el tuyo

Aun así,

 Te recuerdo en mi boca,

Te recuerdo en lengua,

Te recuerdo en mis manos.

No sé que fue

Seguro nada de tu cuerpo

Ni tu piel

Ni tus ojos

Ni tu vientre

Quizás fue tu boca

Quizás fue tu sexo

Quizás tu mirada o tu piel erizada

No se que fue pero te recuerdo.

Puta en quien puta Confía

Absurdo adorar para conseguir al final la pared que impide cruzar al otro lado

Apegarse a esa pared junto a la cama para escuchar promesas 

Una tras otra, la misma

Ilusión, nada más que eso

Topar con la mente estéril pero verídica, al darse cuenta de sencillas pertenencias 

No las tendrás

Velar a la meretriz que dijo amarte, pero se arrastra con cuan zorra perfumada le pase por sus canales

Prefieren astutas putas, que amorosas sumisas

Promesas en la cama donde solo le piensan en el buen sexo

Imaginar futuro con una zorra es como lanzarse al abismo sin nudos que te salven del vértigo que sientes al caer

A veces hay que observar, no dejarse llevar por un simple beso y dejarlo todo allí

Frente la pared

En la cama

La risa es una mentira

Apretar las manos, una más

Impaciente dulce sabor de labios 

Instante de tenerle desnuda sin conocerle

Sin despeinarle los miedos

Mi mayor error fue creerte

Pertenecerte

Mostrarte todos mis rincones de un modo acelerado

Sorprendida y sin entender del todo

Aprendí en tu cuerpo 

Pagándote con besos

Puta quien en puta confía, dicen

Porque sus gustos apetece

Para que dedicar la vida si puedes dedicar poesías.

El arte de perder

El arte de perder no es muy difícil, como dice Elizabeth Bishop 

Descubrir felicidad, 

serenidad

se pierde de igual manera

 No es perder, invariablemente se esta

Probablemente sea el poder de la confianza

el ser testadura al ser feliz

Puede parecer un cataclismo o un hándicap

Conocer lugares,

personas,

mujeres para proseguir conociendo…mujeres

La sensación  añorada es crear el maridaje perfecto

Basta besar bocas para saber si son mías

Besar labios para saber de que están hechas

Tocar manos frías que dicen mucho más

Ser impertinente quizás un poco tímida sumándole inseguridad,

miedo,

deseo…deseo

Se le puede multiplicar astucia,

inocencia…seducción

Nunca  se pierde, siempre se gana

Celeridad por encima…pecado

¿Se Puedo creer volver atrás?

 ¡No! 

Pensar en el ¿por qué? del adiós pero quédate

Y por eso el arte de perder no es muy difícil.